Ingresé al Poder Judicial en 1978 como funcionaria del Juzgado de Menores de Osorno, actualmente Tribunal de Familia, acogiéndome a retiro en 2020. En la década de los 80, el Poder Judicial era conducido en todas sus áreas de forma casi exclusiva por el género masculino, no obstante, procuré integrarme en mi calidad de mujer y participar en el ejercicio gremial para avanzar en los incipientes tiempos de inclusión en temas de derechos, deberes y condiciones laborales, remuneracionales, clima laboral, integración, perfeccionamiento, etc. y de motivar, incentivar, e incluir a colegas mujeres incorporarse a dichos propósitos. Mantuve permanente acción gremial con participación a reuniones que se llevaban a efecto en Santiago, siendo madre de 4 hijos, sin escatimar tiempos de descanso ni sacrificio familiar para ello, con amplia participación junto a dirigentes de época de largas jornadas que culminaron en leyes vigentes a la fecha.